Varios nenes de una salita de un jardín de infantes bebieron accidentalmente el icónico trago «Margarita» durante el horario de receso, lo que provocó que algunos de ellos se sintieran «mareados y con malestar estomacal».
En un primer momento, los directivos no entendían de donde venían estas dolencias hasta que uno de los pequeños mencionó el «juego misterioso» que llevo una compañerita.
El hecho sucedió en Michigan, Estados Unidos, y la historia comenzó a circular por todo el mundo. Según informaron, la pequeña llevó la botella de alcohol en la mochila y sabía perfectamente que esa bebida está prohibida para menores.
⚠️ El grupo de las madres del jardín no culpa a la pequeña, sino a sus padres que no le enseñaron que esa bebida «no es para niños», y al personal del centro educativo que permitieron que sucediera.
